BLOQUE V CREACIÓN LITERARIA.
Los textos que he creado están
destinados a los alumnos de primero de Primaría que cuentan con 6 o 7 años de
edad.
TEXTO
EN VERSO
La estrategia utilizada en este caso es de las más simples, se trata de ¿Cómo
es? Que consiste en inventar
comparaciones sobre objetos o personas del entorno, en nuestro caso de un
familiar cercano, nuestra tía o primo, abuela…etc
Como novedad he incluido asociar los
adjetivos que describen a la persona con
personajes de los libros folklóricos y
tradicionales (Perrault, Grimm, Andersen… ) ya que en la etapa imaginativa en la que
se encuentran es uno de sus temas favoritos.
Pensando también en la etapa del
Pensamiento Intuitivo en la que se hallan los alumnos de esta edad, según el
Centro de Orientación de Lectura, aprovechar la vida imaginativa rica y
abundante que tienen para realizar dicho trabajo.
PORTADA.
TÍA ANA
Autora: xxxxxxx
xxxxxxx xxxxxxx
Mi tía Ana es:
·
Bondadosa
y obediente como La Cenicienta con su madrastra.
·
Cocinera
y repostera como la mamá de Caperucita Roja.
·
Protectora
e inteligente como Mamá Cabra con sus cabritos.
·
Astuta
y servicial como el Gato con Botas con su amo, el molinero.
·
Hermosa
y distinguida como el cisne en el que se convirtió el Patito Feo.
·
Así es
Tía Ana
TEXTO EN PROSA.
Estrategia: Yo soy…
Convertirse en un objeto
doméstico y personalizarlo, describiéndolo y contando su vida, sus
sentimientos...
Lampy, una buena
amiga.
Esta es la historia de Lampy, la lámpara de la mesa de
escritorio de Marian, una mama muy estudiosa y trabajadora, que todas las
tardes se sentaba en su mesa de trabajo y pasaba largas horas conectada al
ordenador y realizando trabajos.
Lampy pasaba la mañana esperando contenta que llegara la
tarde para pasar unas horas entretenida
con Marian, la gustaba verla trabajar, reflexionar, dudar, alegrarse o
disgustarse cuando las cosas no le salían bien.
A veces se desesperaba con el ordenador, perdía el trabajo
realizado durante mucho tiempo y otras
veces no conseguía avanzar y tenía que
abandonar, muy a su pesar.
Pero, por muy mal que fueran las cosas, al día siguiente ¡ahí!
estaba, dispuesta a comenzar de nuevo. Por las noches cuando Marian finalizaba
su tarea y apagaba el ordenador se quedaba mirando a Lampy y la decía: “un
trabajo más y una asignatura menos”; después apagaba la luz y se marchaba a su habitación para acostarse.
Era en esos momentos cuando a Lampy le hubiera gustado
decirle a Marian: “buen trabajo” y “animo” con esfuerzo y constancia todo se
logra en esta vida. Se sentía orgullosa de su dueña y de ayudarla un poco aunque fuera iluminando sus
pensamientos…
Pero una tarde Marian no apareció, ni siquiera entro en la
habitación y a Lampy le pareció raro pues allí en el armario tenía su ropa y
ella siempre se cambiaba en dicha habitación. Tampoco entraron sus hijos al
llegar del cole, que siempre entraban corriendo y atropellándose para dar un
beso a su mamá.
Esa noche Lampy la echo de menos y se sentía triste, no
tenía a quien iluminar ni a quien acompañar, ni compartir tristezas o alegrías,
se sentía muy sola. Sin darse cuenta se había acostumbrado a pasar las tardes
con Marian y a sentirse querida por ella, observada, contemplada,
examinada… pues sabía que su dueña
estaba contenta con ella.
A menudo se ocupaba de su limpieza y la decoraba con un
cubo para lápices y bolígrafos muy
gracioso que hacía juego con ella, perfectamente colocado y recogido; como le gustaba a Marian tener su
escritorio.
Fueron pasando los días y Marian seguía sin aparecer,
nuestra amiga Lampy intuía que algo pasaba en casa; los niños y su marido
apenas pasaban por la habitación y solo los escuchaba a última hora de la
tarde, cuando llegaban para cenar y acostarse.
Y por fin escuchó a los niños hablar por teléfono con su
tía y contarle que mama estaba en el hospital, habían tenido que operarla y
estaban un poco asustadas, pues ellos querían que su mama regresase a casa y
jugase con ellos, los mimara…pero sobre todo que volviese a ser la misma.
Lampy quería gritar y decirles a los niños que ella
también anhelaba que regresase Marian,
deseaba verla trabajar, acompañarla
hasta altas horas de la noche, verla reír o llorar, animarse o desesperarse,
pero tenerla…Tener un objetivo y sentirse valorada como solo su dueña sabía
hacerlo, esa noche, en la penumbra de la habitación, lo deseó con todas sus fuerzas y por la mañana,
cuando despertó…
¡Allí estaba Marian!, había regresado del hospital, se la
veía bien aunque un poco agotada; llego
a la habitación y se sentó ante su mesa de trabajo, y entonces la miro, si a
ella a Lampy, y la dijo: “yo también te he echado de menos “.
Casi la produce un
cortocircuito, la había escuchado, la entendía, la comprendía y por encima de
todo: ¡¡¡¡¡LA QUERÍA!!!!!
DIÁLOGO TEATRAL
Estrategia: hipótesis absurda.
Titulo: EL ÁRBOL MÁGICO.
Escena primera
Narrador: Hoy los niños de casa de Marian,
Daniel y Lucía, están muy alborotados,
les han dado las vacaciones de Navidad y como es costumbre lo primero que hacen
es poner el árbol en el salón de su casa.
Bola: ¡Prepararos chicos que ya
salimos! ¡Otro año más!
Guirnalda: Claro tu tan “contenta”
(haciendo burla), como sabes ¡que te van a colgar!; pero yo no lo tengo tan
claro. Acordaros aquel año que les dio por adornar el árbol con cintas de raso…
Estrella: Bueno tranquilos todos, no
nos pongamos nerviosos antes de empezar. Seguro que los niños nos colocan a
todos en el árbol, ya sabéis que a los niños les encantan los adornos
navideños.
Guirnalda: Ese es el problema que son
muy caprichosos (moviendo un dedito de su cuerpo) y un año te quieren con
locura y otro ni te sacan de la caja.
Bola: Tienes razón Estrella vamos a
calmarnos y no adelantar acontecimientos. Yo también (bajando la voz) llegará
un día que tal vez me caiga y me haga añicos y ¿entonces que? Terminare en un
cubo de basura (cara de tristeza).
Reno: Hola chicos, ya sé que soy
nuevo en este grupo y que llevo poco tiempo entre vosotros pero pienso como
Estrella, ¿cómo si no estaría aquí? Al hijo de Marian, Daniel, el año pasado le
guste mucho e insistió a su madre hasta que ella me compro. Me siento
afortunado de compartir estos días con vosotros.
Guirnalda: ¡Otro que también sabe que
será elegido! Con ese brillo, altura y tipo singular… (en tono de broma) no me
extraña que los niños te adoren.
Escena Segunda
Narrador: Todos los objetos navideños
para adornar el árbol están sobre la
mesa del salón y Daniel y Lucía los van seleccionando para colocarlos; están tan nerviosos que no se dan cuenta que
el reno de cristal se ha quedado en la caja.
Bola: ¡Estupendo chicas! Ya estamos
todas colocadas, da gusto con tantas como somos, tan vistosas, con nuestros
brillos y purpurinas (mirando de reojo a las guirnaldas). La verdad es que
somos bonitas ¿eh?
Guirnalda: Pero mira que eres
creída!!! Nosotras también somos muy atractivas, con colorido y esa longitud,
no nos gana nadie.
Estrella: ¡Esta bien chicas! No
debéis presumir tanto pues si hay alguien que esta por encima de todos, en la
cima, en el puntal…esa soy yo. (Ja ja ja).
Bola: Por cierto ¿no echáis a nadie
en falta?
Guirnalda: No estamos todos: bolas,
lazos, piñas, cajitas, muñecos de nieve, campanas, velas…
Estrella: Ya caigo, falta “el reno”,
si el de cristal, tan guapo y resplandeciente.
Bola: ¿Pero cómo puede ser? Si el año
pasado fue el adorno preferido de los niños, le cogían y jugaban con él para
luego colgarle de nuevo en el árbol, en
el sitio principal (en tono irónico).
Escena Tercera
Narrador: Los niños terminan de
adornar el árbol y se acuestan pues se ha hecho muy tarde para ellos. El reno
se ha quedado en el fondo de la caja, tapado por una bolsa de plástico y no
sabe como pedir ayuda para salir. Sus amigos están fuera y teme que este año no
verá la luz.
Bola: Tenemos que hacer” algo”, no
podemos quedarnos tan panchos, mientras uno de los nuestros se ha quedado
olvidado.
Guirnalda: ¿Y qué podemos hacer?
Estrella: Algo, tenemos que hacer
algo, lo que sea y con urgencia, (en tono enfadado) pues mañana
Marian, la mama de los niños,
bajará la caja de los adornos al trastero hasta que finalicen las fiestas.
Bola: Atención, reunión urgente,
Houston tenemos un problema…
Guirnalda: Aquí estamos todas
preparadas y dispuestas a todo.
Estrella: ¡Tengo un plan! Las
guirnaldas que son tantas y tan largas se unirán unas con otras, después como
si fuese un incendio, nos deslizaremos todos por ellas hasta llegar al suelo,
así nadie se romperá, ni tendrá que
acabar en la basura…
Bola: Bien, perfecto y luego ¿qué
hacemos?
Estrella: Nos meteremos de nuevo en
la caja y mañana cuando se levanten los niños volverán a colocar de nuevo los
adornos y esta vez ayudaremos a Reno para que se coloque a la vista y sea
elegido para formar parte de esta pequeña familia.
Narrado: Así lo hicieron y todos los adornos entraron de nuevo en la caja y ayudaron a Reno a salir
de su escondite. Éste no podía creerlo, lloraba sin cesar y se abrazaba a sus
amigos.
A la mañana siguiente los niños no
podían creer lo que había pasado y estaban convencidos que su árbol era MÁGICO.
CREACIÓN DEL LIBRO
Para la creación del libro he elegido
el texto en verso y el formato “un cuento interminable”.
Como hacer un cuento interminable:
·
Necesitaremos:
cuatro rectángulos de cartulina de 25 cm
de largo por 12,5 cm de ancho
·
Pegamento
·
Lápices
y pinturas de colores.
¿Cómo lo hacemos?
·
Recortaremos
los cuatro rectángulos y los pegaremos
en las cuatro esquinas.
·
Después
de esto es hacer la técnica del doblado
con los rectángulos de cartulina.
·
Debe
quedar a la misma altura por la parte de abajo
·
Los
cuadrados iguales y bien marcados.
·
Y
una vez terminado con el doblado queda listo para crear el cuento
Y a darle rienda suelta a la
imaginación.
A continuación presento las fotos
Perfecto, María José. Unas excelentes explicaciones y unos textos estupendos.
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